Profesionales en respuesta a emergencias.
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Optimizando la Gestión de Emergencias

¿Tu empresa está realmente preparada para gestionar una emergencia crítica?

Una van que transportaba trabajadores a uno de los proyectos de una empresa x, por una carretera de poco tránsito, sufrió una volcadura cerca al proyecto de destino, donde resultaron (gravemente) heridos 3 trabajadores.

Los trabajadores menos heridos trataron de comunicarse con el supervisor quien por una falta de señal no pudo atender la llamada. Tuvieron que esperar casi una hora a que pasara un vehículo que les prestó auxilio para trasladar a los trabajadores a un establecimiento de salud cercano. Cuando el supervisor pudo responder había pasado más de una hora y este trató de comunicarse con el médico del establecimiento. El Jefe de proyecto al enterarse por otra vía, envió la  ambulancia, que solo era tripulada por un paramédico y lamentablemente no estaba equipada para un evento como este.

Durante este tiempo, el trabajador más grave intentaba ser trasladado a otro establecimiento de mayor resolución dado que no tenían fluidos suficiente para reponer el sangrado, falleciendo en el camino. La prensa se hizo dueño de la noticia y adelantó una serie de supuestas causas por las que habría ocurrido el accidente, culpando totalmente a la empresa así como por la falta de su presencia en el escenario de crisis. Esto dañó seriamente la reputación de la empresa y su proyecto fue paralizado para una serie de investigaciones por la autoridad.

¿Crees que esta empresa tenía mapeado este riesgo?

¿Crees que esta empresa estaba preparada y contaba con un plan de respuesta a emergencias o un sistema de comando de incidentes para un evento como este?

La implementación efectiva de sistemas de gestión de incidentes se vuelve fundamental para garantizar una respuesta rápida y coordinada. Es así que el Sistema de Comando de Incidentes (SCI) emerge como una herramienta clave para fortalecer la capacidad de respuesta ante estas situaciones.

El SCI es un modelo de gestión de emergencias ampliamente reconocido a nivel internacional, desarrollado originalmente en los Estados Unidos por el Servicio Forestal en los años 70. Su objetivo principal es proporcionar una estructura organizativa clara y flexible que facilite la coordinación, comunicación y toma de decisiones durante incidentes de cualquier magnitud. Aunque el SCI se ha utilizado principalmente para eventos relacionados con desastres naturales como terremotos, inundaciones y deslizamientos, su utilidad se extiende a una amplia gama de situaciones de emergencia, incluyendo accidentes industriales, crisis de salud pública y eventos de seguridad nacional.

Es común encontrar empresas e instituciones con Sistemas de Comando de Incidentes (SCI) que no están adecuadamente alineados con sus riesgos. Estas organizaciones a menudo carecen de una estructura organizativa y de liderazgo eficiente para gestionar emergencias, no disponen de los recursos ni de los procedimientos necesarios, y no han difundido correctamente el plan de respuesta. Además, los involucrados desconocen completamente el rol que deben desempeñar en una emergencia y no han realizado simulacros o ejercicios para poner en práctica dicho plan.

centralizada. Esto promueve la eficiencia, evita la duplicación de esfuerzos y garantiza una respuesta coherente y coordinada en todas las etapas del incidente.

Además, el SCI incorpora principios de flexibilidad y adaptabilidad, lo que permite su aplicación en diferentes contextos y escalas. La aplicación del SCI en nuestro país implica la adaptación de este modelo a la realidad nacional, teniendo en cuenta las particularidades geográficas, culturales y socioeconómicas del país. También implica un enfoque proactivo en la capacitación y el ejercicio. Es fundamental que todas las entidades involucradas, desde los organismos de respuesta de emergencia hasta las autoridades locales y la sociedad civil, estén familiarizadas con los principios y procedimientos del SCI. La realización regular de ejercicios de simulación y entrenamiento contribuye a fortalecer la preparación y mejorar la coordinación entre los diferentes actores.

Estas son algunas de las preguntas que debe hacerse la Alta Dirección de una empresa o institución en relación a la gestión de posibles emergencias:

Responderis, división especializada de Respuesta a Emergencias de Salus Laboris. Contamos con más de 18 años de experiencia. conócenos aquí.